22 agosto, 2010

Triste historia...

En un imperio muy muy lejano, de otra galaxia, muy lejos de aquí, demasiado lejos, tan lejos ke ni se imaginan ke existe xD habitaba un guerrero llamado Kavi. Además de ser diestro con la espada y con la danza de combate, era un poeta nómada del desierto, su hobbie favorito era perseguir tormentas de arena para ser arrastrado por éstas, pues siempre lo llevaban a lugares fantásticos. Hacía muchos años que no visitaba el lugar donde nació y... por azares del destino, una tormenta del desierto lo llevó hasta ahí.

Kavi no reconoció la ciudad donde nació... pero al ver ciertos edificios y algunas miradas conocidas, cayó en cuenta de que estaba de regreso en su lugar de origen. Trataron de asaltarlo un par de veces pero él, como hábil guerrero, cortó algunas cabezas. Quiso dar una vuelta por sus lugares favoritos, pero estaban arruinados. Triste, muy triste, se sentó en una banqueta tratando de contener las lágrimas... y un vagabundo estelar se acercó y le dio unas palmaditas en la espalda.

-Kavi, soy yo, tu tío Bishr...
-Tío... qué ha pasado con nuestra tierra??
-Te lo contaré...

Después de que partiste, Ofir, un hombre ambicioso tomó el poder por la fuerza... y nos sometió a todos por medio del terror. Él, caprichoso, con locura de poder y riquezas, nos ha quitado lo más valioso que teníamos... Destruyó la ciudad porque no le gustaba, nos sacó a todos con el pretexto de una fiesta de reconciliación, nos emborrachó y mientras estábamos tirados en la plaza... hizo explotar la ciudad. Dio un discurso cursi sobre la unión del pueblo para reconstruirla pero... pocos le creyeron y muchos se rebelaron, pero la mayoría de ellos ya no están... desaparecieron misteriosamente... Tiene una banda de 'sombras negras' y por medio de ellas castiga a quienes intenten sublevarse contra él.

Kavi, furioso, se levantó de ahí y fue a buscar a ese tal Ofir... al estar frente a él, lo desafió... le dijo palabras tan humillantes que no me atrevo a repetir y el tirano, herido en su orgullo... mandó a matarlo.

El poeta guerrero nómada luchó contra las sombras, contra los guardias reales... venciéndoles a todos... pero no pudo vences al gran pterodáctilo rosa de peluche... que lo aprehendió con sus patas y lo elevó por los cielos... la gente gritaba, lanzaban piedras, sin éxito. El dinosaurio se alejó... y nadie supo de Kavi de nuevo. Nadie excepto yo porke yo inventé la historia y sé que Kavi fue arrojado a un volcán inactivo, muy lejos de ahí.

FiN.

P.D. En lo personal... no me gusta esta historia... :(